El miedo acecha
al mundo. La incertidumbre se ha apoderado de toda la ciudadanía que tiene acceso
a la información -ya que aquellos que padecen la hambruna o están inmersos en
un país en guerra bastante tienen con sobrevivir-. Cada día que pasa el horror
se incrementa.
El principal conflicto y más mediático de nuestros días es Siria
aunque sabemos que además de Siria, hay muchos otros frentes abiertos,
vinculados o no a Siria. Están por
ejemplo los enfrentamientos entre Rusia y Turquía para con Siria; o el
conflicto con Ucrania por parte de Rusia y La Unión Europea. La distribución de
refugiados ha provocado un sinfín de tensiones entre países y todavía muchos de
ellos viven en condiciones precarias… Sin contar con el terrorismo ni con todos
aquellos conflictos bélicos que existen en África, América Latina y las no
mencionadas del Medio Oriente.
La guinda en todo
este embrollo internacional la ponen el afán de poder entre Estados Unidos y
Corea del Norte así como las polémicas relaciones entre Estados Unidos y Rusia.
Los servicios secretos relatan que Rusia colaboró para que el republicano
Donald Trump ganara las elecciones y en los últimos días la relación entre
ambos países se ha tensado debido a que Trump, hombre que había prometido no
inmiscuirse en la guerra de Siria en su precampaña, haya ordenado lanzar en
Afganistán de “la madre de las armas” -GBU43/B Massive Ordnance Air Blast Bomb
(MOAB)-.
Las armas
químicas empleadas en Siria y la respuesta armamentística dada con la mayor
bomba no nuclear; o el intento de lanzamiento de un misil por parte de Corea
del Norte -que posee armas nucleares en su poder- han sido las protagonistas de
estos últimos días. Hace un año, BBC publicó un reportaje por motivos de la posibilidad
de que Corea del Norte tuviera la bomba de hidrógeno o termonuclear en donde se
dieron a conocer datos sobre la industria armamentística. En el mismo, se plasmaban
los datos recogidos por el Instituto Internacional de Investigación de la Paz
de Estocolmo (Sipri). Sipri es un instituto internacional independiente
dedicado a la investigación de conflictos bélicos y de la industria de armas. https://www.sipri.org/
Los datos
recopilados en vinculación al emporio armamentístico son desoladores ya que
parece que ésta va en aumento año tras año. Ya el año pasado, a través de este
reportaje se indicaba que “en los últimos cinco años el volumen de
transferencias de los principales sistemas de armamento aumentó alrededor del
14% en comparación con el periodo comprendido entre 2006 y 2011”.
Asimismo, en este
artículo se reflejan los resultados de las estadísticas realizadas por Sipri.
Entre ellos, se puede extraer que el 74% de las exportaciones de armas se
llevan a cabo por parte de Estados Unidos, Rusia, China, Alemania y Francia.
Además, Estados Unidos y Rusia juntos componen el 58% de ventas. Por otro lado,
los países que más armas importaron fueron India, Arabia Saudita, China,
Emiratos Árabes Unidos y Pakistán.
Ante tal
tesitura, considero que para la obtención de la paz hay que comenzar por un
desarme internacional y la prohibición de la industria armamentística ya que de
este modo, ningún país se sentiría amenazado como para seguir importando armas.
El problema siempre reside en los intereses económicos porque la compraventa de
armas también tiene por detrás sus beneficios económicos. También habría que realizar un plan de reestructuración para aquellos trabajadores que se encuentran en las fábricas para poder recolocarlos en otras industrias.
Los Objetivos del
Milenio se han creado para intentar luchar contra la pobreza, desigualdad,
cambio climático… Es cierto que todavía nos queda mucho por hacer, pero es una
pena que no esté incluido dar fin a esta industria que pone en peligro a toda
la humanidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario